Exactamente lo contrario que la entrada anterior. La zona de Riosol llena de ganado y perros y el puerto limpio, así que la decisión fue fácil, quizá el único inconveniente fue que a las 07:30 de la mañana ya hacía un sol de casi verano, sin una brizna de aire para refrescar. Bueno, es lo que hay.
Intento ir a ver si localizo los Rebecos, pero nada, ni están ni tienen pinta de haber estado por la zona, no hay ni un rastro ni medio, ya puestos en labor me quedo por la parte alta a ver que se tercia. Me meto de lleno en el territorio de una Curruca zarcera así que me siento tranquilamente a ver que pasa. No está sola, se mueven por la zona Mirlo común, Acentor común, Curruca capirotada y Chochín, y es continuo el paso de las Chovas piquigualdas, por algo estoy en su terreno.
Hace ya exactamente 10 años, si el archivo del blog no engaña, en esta zona localicé un Acéntor alpino, total, ya que estoy en el sitio y por probar... El caso es que me acerco a la parte donde lo vi, y ¡bingo!, ahí está otra vez, y no solo eso, si no que estoy en plena "zona 0" de sus posesiones, así que me siento tranquilamente a una distancia prudencial y me tiro un par de horas viéndoles entrar y salir cargados de comida para la siguiente generación. Ahí se quedan.... que me sigan dando alegrías por muchos años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario