Después de 5 semanas me acerqué a por la cámara, esperando por un lado que por lo menos las pilas hubieran aguantado y por otro, y sobre todo, que no hubiera volado, aunque el sitio se las traía para encontrarla pero nunca se sabe.
De subida por la carretera bastante animación: un Zorro, un Corzo, tres Ciervas y 8/10 Rebecos. Ya con las botas puestas entre las escobas ya se nota lo entrada de la primavera con los Acéntores dándolo todo a pleno pulmón. Tarabillas, Chochines y alguna Curruca que no pude identificar. Eso sí, todos metidos entre las ramas, ninguno a la vista, salvo este macho de Tarabilla común.
Por la zona del corral hay bastante Lavandera blanca y un par de Colirrojo tizón. A lo lejos una Cierva pasta tranquila hasta que me localiza y se va al trote.
Ya buscando la cámara un par de bufidos de Ciervo me avisan que andan cerca, no los pude ver. Como estos día ha llovido y no hay ganado suelto todavía está la tierra perfecta para cortar algún rastro pero nada del que busco, estos días no se ha movido por aquí el señor Lobo. Sí que hay bastante de Corzo y Ciervo. Tampoco nada del Jabalí.
He debido de fichar a toda la población cervuna de la zona, unas 90 fotos de machos, hembras y pequeños junto con un macho de Corzo. De día, noche, niebla, lluvia... se nota que es su zona.
De vuelta me paro un rato con una familia de Herrerillos capuchino, los adolescentes son bastantes curiosos y mínimo son 6 hermanos los que tengo por el alrededor.
También hubo entretenimiento con alguna de las bastante mariposas que andan por los prados, solo me atrevo a identificar dos, y aún así.... La suerte que están muy activas y no es fácil pillarlas, si no estaría dos días enteros con la guía intentando ponerles nombres porque la verdad que había unas cuantas.
Y aquí la colección cervuna... menos dos.
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